domingo, 6 de noviembre de 2011

impresiones acerca de La Novia de King Kong, de David Mena

Quiero saber qué se siente, y que vaya calando como lluvia fina en mi cerebro, cuando los personajes de los cuentos y las películas están fuera de plano. Quiero saber qué palabras suenan dentro del corazón de los videojuegos o de las viejas melodías del jazz. Ahora sé que hay hombres que desean que Borges nunca hubiera existido para poder llorar durante siglos su pérdida, también hay otros que dicen ser Eliot del mismo modo en que hay poesía en los circuitos de la robótica y la ciencia ficción. Películas de terror de serie B, fábulas griegas, viejos tebeos de superhéroes o gente que vive en los libros y sale de ellos para poder mirarse en un espejo. Tantas cosas, teñidas de belleza tranquila y melancólica precisión, nos encontramos en La Novia de King Kong (Berenice, 2011), un libro de ¿microrrelatos? ¿poemas en prosa? de David Mena que no puedo dejar de recomendar. La Novia de King Kong o los planos sutiles de un laberinto de afectos y hermosas mentiras, milenios de mitos que pudieron ser de otra manera, que cada día lo son si se miran con los ojos idóneos. Los de Mena, por ejemplo.


Si alguien quiere tomar un aperitivo del libro puede bucear un rato en esta página web.