viernes, 14 de octubre de 2011

un poema para el 15 de octubre

Ya no quiero su anestesia,
ni el perfume embustero de su música.
Ya no quiero su danza ni su miedo.
Todo su oro es arena.
Toda su inercia un muro.

Ya no quiero esa luz
que nos impide vernos los unos a los otros.

Ahora quiero caminos, voces, tú.
Ahora quiero escribir un libro nuevo
con la tinta de tantos como yo.

¿Acaso no lo ves?

Para cumplir los sueños
es necesario despertar.
Para alcanzar la luna
hay que mirar de frente al Sol.

Y hoy es el día.

Un mar de manos agitándose
en el idioma sordo del futuro
recorre las calles y las plazas
exigiendo una vida a la altura del hombre.

¿Acaso no lo ven?




(fotografía tomada el 19 de junio en la Plaza de las Velas de Almería por Miguel Ángel Marín)

3 comentarios:

Stalker dijo...

Raúl:

celebro tu poema del 15-M y me sumo a esta indignación colectiva...

también acabo de encontrar esto:

http://www.elpais.com/articulo/portada/Indignacion/elpepuculbab/20111015elpbabpor_1/Tes

Carmeloni dijo...

Me encantó recibir reste trozo de papel en Almería, el lenguaje es importante y la poesía se hace imprescindible como herramienta para entender algunas realidades.
Encantada.

raúl quinto dijo...

Stalker,

veo que sigues con tus mismos vicios jeje. Me parece muy interesante lo de Maillard y aporta otro enfoque también necesario, espiritual y compasivo. Si se puede conjugar con un discurso económico y político más urgente, pues mejor.


Carmeloni,

el papel es tuyo, cada verso es de todos. El sábado fue un gran día. habrá q recordarlo siempre que nos digan que no podemos.